Más de medio millón de adultos mayores trabajan de manera informal:

La necesidad de un nuevo escenario laboral para la tercera edad

Chile se está envejeciendo, es una realidad. Según el Censo 2017, los adultos mayores superan las 2 millones 800 mil personas, equivalentes al 16,2% de los habitantes en nuestro país. Una situación muy distinta a la que vivíamos en 1950, en donde la población superior a los 60 años llegaba solo al 6%.

Es por esta razón que las políticas públicas han debido adaptarse a esta nueva realidad. El principal motor son pensiones dignas y una salud acorde a sus necesidades. Sin embargo, eso no es todo, ya que con el aumento de la esperanza de vida viene consigo un nuevo problema: la inactividad.

Y es que, si bien la tercera edad está asociada a un período de merecido descanso, la realidad dicta que, ya sea por el profundo problema de pensiones o simplemente por la necesidad de seguir sintiéndose “útil”, muchas personas de este rango etario deciden seguir perteneciendo a la población trabajadora.

De hecho, según datos de la Tercera Encuesta Nacional de Calidad de Vida en la Vejez, realizada en 2013, un 64% de los encuestados declara que su decisión de trabajar obedece a una necesidad económica. No obstante, el estudio arroja que un 66% de las personas mayores que trabaja seguiría haciéndolo, incluso si no tuviera la necesidad económica de hacerlo.

El problema pasa porque una alta tasa de adultos mayores trabaja de manera informal. Según un informe del INE (Instituto Nacional de Estadísticas), son 575.051 los empleados de más de 60 que trabajan sin un contrato. Muchos de ellos, además, bajo el sueldo mínimo.

¿La solución?

Que el Estado intervenga para que las condiciones laborales de los adultos mayores sean acordes a las necesidades que este grupo tenga. Una aproximación a eso es el programa “Experiencia Mayor” que lanzó el Ministerio del Trabajo. Este busca subsidiar a las empresas que contraten adultos mayores para fomentar así la inserción de cada vez más personas de la tercera edad.

Además, existen conglomerados de empresas que han lanzado programas laborales para personas sobre 60 años. Uno de ellos es Walmart, que en 2019 lanzó su plan “Anfitriones Senior”, que busca incorporar trabajadores de esa edad para ser promotores de distintas marcas relacionadas con sus necesidades.

Iniciativas válidas y que buscan incorporar cada vez más al adulto mayor al mundo laboral, pero que serán insuficientes si no se le suman otras. Y es que la realidad laboral de nuestro país viene cambiando hace años y si no se incluye a la tercera edad en ella, las necesidades de estas personas seguirán aumentando con el paso de los años.