Cómo lograr la atención plena a través de la meditación
Si nos proponemos describir lo que es el Mindfulness, la mejor definición sería que es una técnica de meditación que busca centrar la mente en el momento presente, para así ser conscientes de nosotros mismos y de lo que nos rodea.
Esta explicación puede parecer sencilla, pero no lo es. Estamos constantemente bombardeados de pensamientos que nos sacan del momento presente y nos llevan ya sea al pasado o al futuro. Es por esto que se hacen necesarias técnicas que nos ayuden a concentrarnos en el presente.
Uno de los métodos más conocidos para llegar a la atención plena o mindfulness es centrar la mente en la respiración, inhalando y exhalando lentamente, dedicándonos a sentir el paso del aire a través de nuestros pulmones.
Otra técnica bastante utilizada es la de la apreciación, es decir, ser conscientes de las acciones que realizamos. Hay acciones que pasan a ser tan cotidianas que llegamos a realizarlas de manera automática, como lavarnos las manos o caminar. Este método apunta a volver a prestar atención a estas acciones.
Una vez que nos adentramos en la meditación nos damos cuenta que nuestra existencia va más allá de los que solemos definir como un “yo”, es decir, el cuerpo, la mente y las emociones. Estos tres aspectos de nosotros mismos están ligados por algo más que los conecta y dirige, una energía que en la cotidianeidad se mantiene casi imperceptible, ya que permanece envuelta en la enorme cantidad de estímulos externos que recibimos a través de nuestros sentidos.
La meditación también apunta a lograr sentir esta energía, y con eso, descubrir que la importancia de estar presentes no solo en el mundo exterior, sino también en nuestro mundo interior, pues es ahí donde todos somos iguales. El cuerpo es un vehículo maravilloso que nos permite conectar con el mundo, pero lo más importante yace en el interior, y a ese lugar es donde nos permite llegar la meditación.